Si quieres dar de baja tu ADSL sin que las penalizaciones te supongan un coste extra, la solución está en ofrecer a tu proveedor una baja por causa justificada.

¿Qué se considera una causa justificada?

Las compañías de ADSL, así como los proveedores de comunicaciones en general, cada vez ponen más difícil el tramitar la baja de sus servicios. Con la mayoría de ellos, lo normal es contar con un contrato de permanencia que nos obligue a mantener la vinculación al menos 12 meses. También hay compañías con las que no tendrás que firmar contrato de permanencia, como es el caso de Jazztel, pero es una de las excepciones.

Se pueden dar diferentes situaciones en las que se considera justificada la baja del servicio. En esas circunstancias tu compañía de banda ancha no podría penalizarte.

1. Cuando, tras haber contratado a través de internet o telefónicamente, no quedas conforme con el servicio.
En este caso, tienes 7 días para avisar a tu proveedor de tu deseo de dar de baja el servicio. En un plazo máximo de 30 días deberán devolverte todos los gastos que hayas realizado.
Siempre y cuando estés dentro del plazo indicado, no podrán penalizarte con ningún pago ya que estás dentro del periodo de prueba que marca la ley.

2. Otro de los casos es que, una vez contratado y transcurrido el periodo de prueba, el servicio sufra interrupciones o, en definitiva, que no cumpla con las prestaciones ofrecidas.
Es importante que al llamar a tu operadora dejes clara la razón de la baja, indicando que no es por voluntad si no porque la compañía de ADSL no puede cumplir con su parte del contrato.

Si ya te has dado de baja de tu compañía y estás buscando un nuevo proveedor, compara precios y condiciones en una comparativa de ADSL.
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