El modelo P660HW-D1, es el router que nos proporciona Telefónica con dos de sus productos, Trío y Dúo de la gama Imagenio. Es un router con buenas prestaciones y uno de los más completos que podemos encontrarnos en el mercado actualmente.  Su instalación es muy sencilla, solo tenemos que conectarlo al PC a través del cable de red, y hacerle llegar la conexión ADSL.  Para comprobar que esta instalación es correcta tendremos que comprar los LEDs del frontal y ver lo siguiente:

• Power: Verde
• Número de Puerto (1,2,3,4): Verde
• WLAN: Verde
• DSL: Verde
• Internet: Apagado

Una vez estamos con el router funcionando, solo tendremos que introducirle un usuario y una contraseña asignado por el proveedor para acabar de tener acceso a Internet, momento en el que la luz de Internet pasará también a tener color verde, momento en el que podremos navegar ya con normalidad. En este momento, el router obtendrá una IP automática, pero en caso de que no lo hiciese así, tendríamos que ir a la configuración de nuestra tarjeta TCP/IP a hacerlo manualmente.

Una vez tenemos el router ya instalado, podremos acceder a su panel de control desde un navegador con la puerta de enlace, que por defecto es http://192.168.1.1 . Entonces llegaremos a un panel de control en el que lo primero que nos hará, es pedirnos un Usuario y una Clave. Por defecto, el usuario es 1234 y la calve es 1234, pero si es Telefónica el que nos proporciona el router, las contraseñas pueden ser diferentes por lo que tendremos que ponernos en contacto con ellos para que nos las den y acceder al panel de control, donde podremos cambiarlas y poner unas más sencillas de recordar.

Una vez dentro, veremos un menú en el que podremos acceder a las configuraciones de las redes inalámbricas (Wireless LAN) o puertos del router (NAT), configuración que además, si hemos contratado el servicio con Telefónica, podremos configurar a través del portal Alejandra para facilitarnos la tarea. Especialmente delicado es el tema de los puertos, donde no es recomendable hacer modificaciones salvo que uno sea consciente de lo que está haciendo.